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Un reto al que se enfrentan los artesanos de Puebla y del resto del mundo es al relevo generacional, pues muchos de los jóvenes en las comunidades en donde se crean estos productos, ya no quieren continuar con el trabajo que empezaron sus antepasados. Fue por ello que se creó el programa Artesanialls, que busca apoyar a los artesanos poblanos en su profesionalización dentro de las más de 18 ramas que hay en el territorio.
El proyecto está encabezado por la Secretaría de Economía, puntualmente por su Subsecretaría de Innovación, Competitividad y Emprendimiento. Al día de hoy, dan acompañamiento a 30 grupos distribuidos en 19 municipios del estado con 132 beneficiarios. Las ramas de artesanías que se abarcan son ónix, talavera, palma, barro, bordados, textiles, platería, papel picado, entre otros.
El objetivo es que los jóvenes vuelvan a identificarse con el trabajo de sus comunidades y que apoyen a sus padres o abuelos a que no se pierda la identidad; pero, al tiempo, que se promuevan nuevas técnicas artesanales, procesos innovadores de elaboración y que se generen alianzas con otras empresas artesanales para su crecimiento.
En entrevista, Jaime Guzmán Orozco, titular de la Subsecretaría, explicó que este programa se diseñó a finales del 2020 para implementarlo en los años consecuentes. Además, su meta fue concretarse en coordinación con la Secretaría de Cultura por su cercanía con las comunidades artesanas.
“Este sector siempre se ha visto desde lo pequeño, muy en corto, muy local y nosotros queríamos que dejaran de verlo así, sino como algo grande. Por naturaleza, los artesanos tienen este tipo de colaboraciones y cooperación entre ellos, son empresas familiares y son técnicas que se van transmitiendo de generación en generación”, comentó.
Nuevas generaciones se niegan a aprender la elaboración de artesanías
Cuando acudieron a las visitas de campo, notaron una problemática, pues las nuevas generaciones ya no quieren adentrase a este mundo y seguir aprendiendo de las ramas artesanales, pero les explicaron la importancia de hacer grandes cosas desde su comunidad y que con sus artesanías podían llegar a varias partes del país y del mundo.
Para lograr lo anterior tuvieron como aliado el IDIT de Universidad Iberoamericana campus Puebla, que es un centro que promueve la accesibilidad tecnológica para el diseño y fabricación personalizada, también acompaña a las organizaciones en sus procesos de gestación de nuevos productos.
“El nombre Artesanillas viene de la mezcla de las generaciones, como se están alejando y como las estamos atrayendo al tema artesanal. Arte es por todo lo que implica la artesanía, y el final por millennials”, compartió.
Dentro de este programa a los artesanos les enseñaron visión empresarial, las ventajas de ser una empresa, temas fiscales, figuras jurídicas, costos y hasta finanzas personales. De igual modo, el tema de la innovación para que los jóvenes propusieran ideas acordes con las nuevas generaciones sin perder la esencia de sus comunidades.
El subsecretario dejó en claro que esta innovación no fue abrupta, ni obligatoria, sino que a los artesanos sólo se les dieron las herramientas necesarias para simplificar un proceso o para hacer nuevos artículos que sean más competitivos en el mercado. En este punto se les brindaron tendencias de patronaje.
Otro punto que se abordó fue el de las redes de colaboración, ya que muchos de ellos no sabían cómo crear estrategias en conjunto con otros artesanos y, además, que esas redes fueran sostenibles. La idea de este último es que ellos se convirtieran en buenos negociadores y que no necesitaran de la dependencia para la gestión, ni conexión.
Artesanos se fortalecer para ampliar su mercado
Con el tiempo, estos artesanos han tenido acompañamiento y son invitados a las expos que impulsa la administración estatal o los stands que se colocan en las diferentes plazas, pero, gracias a todas estas herramientas, esto sólo es una pequeña ayuda, ya que hay un grupo que informó que querían ir a una expo en el extranjero, uno más que ya está en planes de expandir el negocio y otro, que sólo pidió orientación para vender en un hotel. En resumen, ya no dependen del gobierno.
“Ellos ya toman decisiones, empiezan a buscar a otros mercados y no sólo en Puebla, en otros estados. A través de estas redes pudieron conocer eso y vincularse. Fue el objetivo, desarrollar grupos colectivos fuertes y se está logrando (…) esa es la parte que a mí me emociona, ver que ellos ya toman sus propias decisiones y decisiones grandes, decisiones internacionales”, agregó.
En estos momentos no se pueden inscribir más artesanos al programa, pero el funcionario espera que el próximo año se pueda abrir una nueva convocatoria para apoyar a más grupos.
Al preguntarle a Guzmán Orozco la importancia de enfocarse en este gremio, los millennials e impulsar las artesanías, respondió que es de suma importancia, ya que se está visibilizando el trabajo que se hace en Puebla y se les está dando el valor que merecen.
“No se quiere perder este tema cultural y la identidad que genera porque justo eso, si los jóvenes ya no quieren continuar se puede perder. Creo que se han dado cuenta que en sus manos hay mucha historia y que pueden abonar desde lo que saben hacer, como redes sociales, o lo que estudiaron a que no termine el legado”, concluyó.
Fuente: El sol de Puebla
